Privacidad en Facebook

¿Facebook o no Facebook? Esa parece ser la cuestión web 2.0. ¿Es suscribirse a esta red una entrega completa de nuestra privacidad? ¿Rompe definitivamente con el límite entre lo público y lo privado? Son estas preguntas que muchos nos hacemos al registrarnos a servicios como Tuenti, Facebook, MySpace y otros. Las redes sociales tienen la ventaja de que podemos mantenernos en contacto con amigos, familiares y conocidos, pero hay un punto en que debemos trazar un límite: no todos tienen que conocer todo sobre nuestras vidas.

Por suerte -y aunque muchos no lo sepan- Facebook permite clasificar la información personal que pone a disposición de otros, y a quién brindar esta información. Para esto, claro, debemos saber cómo configurar el servicio para que no se nos vaya de las manos. En este artículo examinaremos algunas estrategias para mantener nuestra identidad a salvo en la red.

Configurar a conciencia

Esto es algo que debemos hacer no sólo en Facebook. Muchas veces no nos metemos con las Opciones Avanzadas de los programas porque pensamos que lo avanzado debe ser para programadores, profesionales o entendidos en la materia. Sin embargo, cada vez que instalamos nuevo software o aplicación web, es siempre recomendable hurgar un poco por las opciones, ver qué nos permiten configurar para usarlas de acuerdo a nuestras necesidades.

En Facebook, esto no es difícil de hacer. Para ello, en Opciones, elegimos Opciones de Privacidad. En forma predeterminada, Facebook permite que todas nuestras redes y todos nuestros amigos puedan ver nuestro perfil. Como las redes o grupos pueden tener miles de personas que no conocemos, esto se puede tornar peligroso, por lo que es buena práctica permitirle sólo a nuestros amigos tener acceso a nuestro perfil completo. Con las fotos y los vídeos sucede algo similar: debemos cuidarnos de que cualquiera tenga acceso a fotos o vídeos comprometedores: ya hemos conocido por las noticias cómo los jefes revisan los perfiles de los empleados para conocer más sobre ellos, por lo que mejor arriesgar. La máxima sería: “si no lo publicarías en tu CV, pues no lo hagas online”. También es sabio elegir que sólo nuestros amigos vean si estamos online, o los cambios de estado que hacemos, los comentarios o todo tipo de información que pueda resultar sensible. No se trata de estar paranoicos, solo de salvaguardar nuestro derecho a la privacidad.

Información de contacto

Facebook permite que sus miembros controlen quién puede acceder a información de contacto. Si bien cualquiera puede hacerlo (Facebook permite mostrar todo a todo el mundo) esta opción realmente no es muy sabia si queremos guardar privacidad. Lo mejor es no mostrar número de móvil, de casa, dirección o email. Siempre está la posibilidad de que, una vez generado un contacto con un desconocido y habiéndonos asegurado de su procedencia, le brindemos esta información en una instancia ulterior. Como último consejo, debemos tener en cuenta que agregar amigos sin un filtro puede ser perjudicial. Mejor mantener nuestra lista de contactos breve pero efectiva, sin agregar personas que no conocemos y que no sabemos qué incidencia podrían tener en nuestras relaciones personales.

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